Cómo la infraestructura de TI puede contribuir a la Economía Circular
Ociel Jain – Director Regional Bajío
En un mundo donde la sostenibilidad se ha convertido en una necesidad más que en una opción, la economía circular ofrece un modelo prometedor para el futuro de la producción y el consumo. La economía circular propone un cambio radical desde el tradicional modelo lineal de ‘producir, usar y desechar’, hacia uno que enfatiza la reutilización, la reparación, la renovación y el reciclaje de los componentes.
En el sector de la TI, esto se traduce en diseñar infraestructuras que apoyen la modularidad y la longevidad de los equipos. Optar por diseños modulares permite actualizaciones y mantenimientos más sencillos sin necesidad de reemplazar equipos enteros, lo que extiende la vida útil de los recursos y reduce la cantidad de desechos electrónicos.
Uno de los aspectos más impactantes es la virtualización de servidores y aplicaciones. Esta tecnología permite a las empresas operar con menos hardware físico, lo cual reduce significativamente el consumo de energía y la cantidad de equipos que eventualmente se convertirán en desechos electrónicos, comparado, con la misma cantidad de equipos que se utilizarian de manera tradicional. Además, la centralización de recursos en servidores eficientes a través del cloud computing reduce la redundancia de los equipos y disminuye tanto el consumo energético como la emisión de carbono de los centros de datos.
De igual manera, la inteligencia artificial (IA) está revolucionando la manera en que utilizamos los recursos de TI.
al predecir la demanda y ajustar los recursos automáticamente, la IA asegura que solo se consuma la energía necesaria, reduciendo el desperdicio. También, algoritmos avanzados pueden prever fallos en los equipos, lo que permite reparaciones oportunas antes de que los sistemas fallen completamente, extendiendo así la vida útil del hardware y evitando el reemplazo prematuro.
Un aspecto crucial para incorporar la economía circular en TI es la implementación de programas de recuperación de activos. Estos programas no solo maximizan el retorno de la inversión al prolongar la vida útil de los equipos, sino que también promueven la reutilización y el reciclaje de componentes. Cuando los equipos llegan al final de su ciclo de vida útil, es esencial adoptar estrategias de reciclaje en circuito cerrado. Esto asegura que los materiales valiosos se recuperen y reintegren en el ciclo productivo, disminuyendo la demanda de recursos vírgenes y minimizando el impacto ambiental.
La colaboración entre empresas, proveedores y fabricantes es fundamental para fomentar una cadena de suministro circular. Al trabajar conjuntamente con socios comprometidos con la sostenibilidad, se pueden implementar prácticas que abarquen desde el diseño hasta la disposición final de los reciduos, asegurando un enfoque coherente y efectivo hacia la circularidad.
Adoptar estos principios no solo tiene beneficios ambientales, sino que también ofrece ventajas económicas significativas. Por ejemplo, al reducir la necesidad de recursos nuevos y maximizar la eficiencia de los ya adquiridos, las empresas pueden ver una reducción notable en los costos de adquisición y mantenimiento. Este modelo de negocio no solo mejora la imagen de responsabilidad social corporativa de una empresa, atrayendo a consumidores y socios que valoran la sostenibilidad, sino que también asegura que las inversiones en TI sean duraderas y adaptables a las nuevas tecnologías que continúan emergiendo.
Para integrar efectivamente la economía circular en la infraestructura de TI, las organizaciones deben:
• Realizar auditorías regulares para identificar oportunidades de mejora en la utilización de recursos.
• Capacitar a equipos de TI y stakeholders sobre la importancia y los beneficios de la economía circular.
• Evaluar y ajustar continuamente las estrategias de ciclo de vida de los activos para alinearlas con los objetivos de sostenibilidad.
Al redefinir la manera en que se diseñan, utilizan y gestionan los recursos tecnológicos, las empresas no solo pueden mitigar su impacto ambiental, sino también establecer un modelo operativo más resiliente y económicamente viable. Integrar la economía circular en la infraestructura de TI no es solo una necesidad ética, sino una estrategia inteligente que promueve la sostenibilidad y ofrece una ventaja competitiva en el mercado.
A través de la integración de soluciones tecnológicas, Magnet apoya la implementación de infraestructuras más sostenibles y eficientes. Este enfoque considera la eficiencia energética y la minimización del impacto ambiental, alineándose con las necesidades globales de reducir la huella de carbono y promover prácticas más verdes en el sector tecnológico.